Tras meses de trabajo interno y coordinación interregional, el pasado 5 de octubre a las 19:00 celebramos la 1ª Asamblea Abierta de la Coordinadora Madrileña de Arqueología de CNT Comarcal Sur-Villaverde. A nuestro modo de ver, un completo éxito: más de una veintena de personas, con representación del Colegio de Arqueólogos de Madrid y de nuestra querida Coordinadora Valenciana de Arqueología de CNT València, además de antiguos miembros del CRAS (Centro Revolucionario de Arqueología Social) y la AMTTA (Asociación Madrileña de Trabajadores y Trabajadoras en Arqueología), donde pudimos poner en común, a través de una multitud de voces, la lucha que tenemos por delante todas y todos los profesionales de arqueología.
Dividimos el orden del día en los tres principales pilares sobre los que veíamos necesidad de exponer y debatir: la investigación, el entorno estudiantil y, por último, la arqueología profesional. Este orden ex profeso fue pensado, principalmente, en consonancia con la amplitud de cada tema y el tiempo que a priori nos podía llevar.
Así pues, se introdujo por parte del equipo de la Coordinadora y CNT la labor de éstas y, de manera superficial, se explicó en este primer punto la necesidad de organizarnos también en el entorno académico y de investigación, materia que tenemos pendiente y en el cual ya se está trabajando a nivel interno.
Seguidamente, sin ninguna intervención más, dimos paso a la problemática estudiantil. Pasado, presente y futuro profesional se confrontan en esta línea, en la cual se abordaron temas de vital importancia para el sindicalismo combativo, contando con la importante perspectiva de les propies estudiantes que acudieron a la asamblea. En la materia se lidió con los “voluntariados”, las prácticas no remuneradas y los abusos de poder en muchas excavaciones que se escudan en las “funciones sociales” o de “formación” de algunos proyectos para crear auténticos campos de trabajo por los que se llegan a pagar. Fue clave para el debate el tener en cuenta que lo que vivimos en nuestros primeros pasos de formación, será un reflejo de nuestro futuro profesional. Al fin y al cabo, un futuro profesional que, por normal general, deviene extremadamente minado por la mala praxis de instituciones y/o departamentos donde confluyen intereses personales, individualismos, frustraciones, miedos, desunión, competición e insolidaridad hipernormalizada lo que genera un caldo de cultivo para el abuso, la pasividad y el conformismo que nos impide ver un horizonte de dignidad para nuestra profesión. Con ello, combatir desde acciones directas (boicots, denuncias, etc.) todos estos abusos y potenciar asimismo el sindicalismo en las aulas al integrar la voz universitaria en nuestras prioridades, no sólo de acción, sino también de diálogo con movimientos estudiantiles tales como la FEL.
Por último, y no menos importante, el tratamiento de la arqueología profesional comúnmente llamada de gestión o “comercial”. Desde luego, uno de los temas más extensos y complejos el cual nos ha traído hasta aquí. En la misma asamblea se muestran los objetivos a medio y largo plazo de la Coordinadora, entre ellos la toma de testigo de asociaciones como la AMTTA para trabajar un convenio propio que nos proporcione una seguridad de derechos laborales de los que no gozamos y una herramienta sindical que vele por nuestros intereses como clase trabajadora. Se exponen desde la multivocalidad de la mesa redonda las antiguas problemáticas que surgieron en la conquista de un convenio en Madrid o la necesidad de creación de una CNAE (Clasificación Nacional de Actividades Económicas) que contemple nuestra profesión. Entre otros tantos temas, se aborda la casuística de los autónomos y la amplia cantidad de profesionales en calidad de “falsos autónomos”, el intrusismo laboral, problemáticas internacionales como la CIFA (The Chartered Institute for Archaeologists) inglesa o nacionales con la nueva actualización de la Dirección General sobre la Ley de Patrimonio que está por venir.
Una vez finalizada la asamblea sobre las 21:15, el ambiente que se respira es, cuando menos, esperanzador. Hay necesidad y ganas de trabajar para conquistar los derechos que no tenemos desde la única vía no explorada por parte de la arqueología: el sindicalismo. Sin embargo, esta vez, contamos con una herramienta histórica que nos ampara, además de la experiencia de años de estudio, abuso y trabajo que hemos sufrido todas y todos aquellos que hemos trabajado por y para el patrimonio.
Coordinadora Arqueología – Comarcal Sur Madrid